Hasta Revilla está contra la subida del IVA

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Revilla defiende un impuesto para "los ricos", frente al IVA que "no selecciona"

(Europa Press).- El presidente de Cantabria cree que la crisis se llevará "por delante" al Gobierno Zapatero si "no hay remedio" en dos años. Miguel Angel Revilla interviene todos los domingos en VAYA DOMINGO, programa matinal de Radio Rabel.

El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, es partidario de establecer un "impuesto de los ricos", que paguen quienes han acumulado "más riqueza" y "más ganan", frente al IVA, que es "imparcial" y "no selecciona al rico del pobre".

"El IVA es el impuesto peor de todos, porque la gasolina la usa todo el mundo", lo mismo que el pan o las verduras, dijo Revilla, por la decisión del Gobierno central de subir este impuesto.

En cualquier caso, consideró que "hay que subir impuestos" en la actual coyuntura económica, ya que de lo contrario "no hay inversiones y no se puede mantener el ritmo del Estado", aunque el "problema" es estudiar "muy bien" y "acertar" con cuáles se suben. Al respecto, dijo que echa "en falta" y le ha "extrañado" que no se haya "metido mano" a un impuesto "de las grandes fortunas, de los grandes sueldos", que "además de ser popular, sería absolutamente justo".

"Tendría que hacerse un impuesto especial en esta coyuntura, a lo mejor no para siempre", pero con el que "decir con claridad" a los que han acumulado mayor riqueza y más ganan "que paguen", lo que sería "un gesto de solidaridad", ya que la sociedad "les ha permitido enriquecerse y ahora les pide una cierta devolución de esa riqueza en aras de que el país siga prosperando", recalcó.

En ese sentido, señaló que en España hay "500 ó 600" familias que tienen un patrimonio de "mil millones de euros", que les genera al año incrementos del "20 por ciento".

Revilla reiteró que, de cualquier manera, hay que subir "algunos" impuestos, aunque "cuando no se está en el Gobierno", decir que no se suban y que se aumenten las inversiones "suena muy bien", pero "ese milagro yo no lo conozco", apuntó.

Consideró además que si la actual crisis "sigue en esta línea" de aquí a dos años y "no hay remedio" para ello, se llevará "por delante" al Gobierno de Rodríguez Zapatero, aunque en este tiempo pueden pasar "muchas cosas" y la "ventaja" del Ejecutivo es que está "a mitad de recorrido" de la legislatura y "puede tomar medidas".

"Las crisis, si son pronunciadas y no se ve atisbo de salida, se llevan por delante a todos los gobiernos que están en ese momento", dijo. En su opinión, lo que la gente "más valora", con independencia de sus "simpatías políticas", es que la economía "funcione" y haya una "perspectiva" de empleo y seguridad, de ahí que "si no hay remedio para la crisis" y "me preguntáis si esto se lleva por delante al Gobierno que hay actualmente: sí", apostilló.

"Apretón en el gasto"

Sobre las medidas de Cantabria para hacer frente a la crisis, de acuerdo con el plan de austeridad planteado por el Gobierno de la nación, indicó que el Ejecutivo regional ya ha empezado a "hacer números" y va a tener que "pegar un recorte y un apretón en el gasto", que va a afectar "fundamentalmente" al corriente.

Explicó que se va a intentar "pegar un recorte" por la vía de "amortizar" plazas en la Administración pública según se vayan jubilando los funcionarios, salvo que ocupen un puesto "absolutamente fundamental", precisó.

Añadió que Cantabria "va a hacer" este recorte, como todas las comunidades, aunque no es la que "peor" está "ni mucho menos", ya que está "muy poco endeudada" y es la "más saneada", al "nivel" del País Vasco o Navarra, mientras que otras están "absolutamente disparadas".

Destacó en concreto la "situación terrible" en la que se encuentran, a su juicio, autonomías como la Comunidad Valenciana o Madrid, frente al endeudamiento "moderado" de Cantabria, que tiene "casi la mitad de deuda" que en 1995, recalcó.

"Eso quiere decir que no hemos tirado la casa por la ventana", dijo Revilla, para quien Cantabria no está pagando "las alegrías" de otros gobiernos autonómicos, pero "lo que no puede haber aquí es excepciones" y mientras unos han "cumplido" haya "algún tipo de amnistía" para "los que se han tomado la vida a la ligera", opinó.