Iñaki Ezkerra: “Me da mucha pena en lo que se ha convertido el Foro de Ermua”
“Recordaría a su presidenta que ‘aunque no se folle, se puede también ir al infierno"
El ex presidente del Foro Ermua, Iñaki Ezkerra, ha reflexionado para El Plural sobre el momento actual en la lucha contra ETA, pero también sobre cómo se está viviendo este momento en distintos sectores y colectivos de la sociedad española. Sobre el Foro Ermua, Ezkerra se expresa brevemente pero de modo contundente: “Me da mucha pena en lo que se ha convertido. Y sobre su presidenta en funciones, Inma Castilla de Cortázar, lo único que le recordaría es que se acuerde de lo que dice Ratzinger en su última encíclica: “Aunque no se folle, se puede también ir al infierno”.
Iñaki Ezkerra prefiere no referirse al Foro de Ermua en la entrevista, pero deja claras ciertas críticas al arribismo de algunos miembros dentro de dicho colectivo: “Hay gente en general que tiene poco cerebro, en el Foro había personas que teníamos oficio y profesión, que nos hemos dedicado a escribir y que no nos hemos llevado más que palos por esto; pero también los hay que no siendo nadie o que no teniendo esa capacidad se han visto convertidos ahí en un oráculo. La vida es así. Estar amenazado o tener escolta no garantiza la inteligencia”.
Derecha basura
Aunque afirma que sigue estando en la misma posición, Ezkerra quiere marcar una diferencia muy grande entre la legislatura anterior y la actual: “La anterior fue durísima, con una izquierda basura que cuestionó a las víctimas para negociar con ETA. Pero lo que caracteriza a la legislatura actual es una derecha basura, de un talibanismo impostado y falso. No es coherente ni consecuente, no se puede ir por el cuarto divorcio y querer representar las esencias católicas.
Descomposición del movimiento cívico
Además de por un cambio en la conducta de las principales fuerzas políticas –con gran incidencia en la lucha contra el terrorismo-, el ex presidente del Foro caracteriza el momento actual como de “descomposición fratricida de la derecha española, con la propia descomposición del movimiento cívico”.
El caso de Mayor Oreja
Para explicar ambos fenómenos, Ezkerra recurre a un viejo conocido, el influyente Jaime Mayor Oreja: “Ha dejado de representar lo que representó. El movimiento cívico era plural, abierto, y si Mayor Oreja en un momento determinado encarnó ese espíritu fue porque mostraba una postura abierta a la izquierda. Se fotografiaba con Savater, Vidal de Nicolás, conmigo, etc. Si resulta que, por intereses personales y por una estrategia determinada le interesa abrazar el integrismo católico, deja de representar lo que representaba. El paso definitivo lo dio al estar presente como único representante del PP en la manifestación de los obispos. Rompe ahí Mayor el lazo con el movimiento cívico”.
Traicionar el Espíritu de Ermua
De esta forma, el actual comportamiento de un antiguo “referente” como Mayor Oreja tendría detrás, posiblemente, la motivación añadida de “contrarrestar el liderazgo de Rajoy”. Una conducta que supondría cierta gravedad al venir de quien viene: “No puede ser que utilices el crédito que has conseguido con las víctimas y amenazados y te lo intentes cobrar. Que exijas el cobro de eso y que lo utilices para otra cosa, que es justo para traicionar aquel Espíritu de Ermua”.
El enfado de Vidal de Nicolás
Un comportamiento, el de Mayor Oreja, que tuvo otro momento candente cuando habló de la “placidez” del franquismo en el País Vasco. Unas declaraciones que, según Iñaki Ezkerra, enfadaron enormemente al primer presidente del Foro, Vidal de Nicolás, que rechazó hace unas semanas el premio Convivencia Cívica a manos del mismo colectivo: “Vidal de Nicolás, que estuvo en la cárcel en los años del franquismo, se agarró un buen cabreo con lo que dijo Mayor. Además, no es cierto lo que se dice de que su amistad con él fuera uno de los pilares del Foro. Mayor tenía relación con José Luis López de la Calle, y a partir de él nos conoció a los demás. Tenía el contacto con Vidal de Nicolás que tenía con el propio Foro”.
Una oportunidad histórica
Por otro lado, la nueva conducta de estos antiguos “referentes ideológicos”, algunos de ellos convertidos en “monstruos”, estaría perjudicando la postura que la sociedad española tendría que mantener ante la conducta actual del Ejecutivo socialista: “Hay un cambio en la actitud del Gobierno de Zapatero. Estamos viviendo un momento emocionante, en el que precisamente se puede volver al Espíritu de Ermua. Se empieza a ver luz, el PSOE aunque no haya hecho autocrítica, está rectificando. Hay que aprovechar la gran oportunidad histórica de un presidente francés que está ayudando. Tenemos una oportunidad para acabar con ETA.
Ojalá gane Patxi López
“En este momento, personas responsables como Antonio Basagoiti tienen que intentar conseguir que el PSOE se dé cuenta de esto. Decir, como ha dicho alguno, que se prefiere el PNV a Patxi López en el País Vasco es una estupidez, un delirio. Ojalá gane Patxi López, ojalá gane el PP y ojalá gane el constitucionalismo”.
Nuevos antietarras
Un espacio muy crítico dedica Ezkerra para analizar la figura de personas “que se han inventado su biografía contra ETA”: “Me alegro de que haya mucha gente que se vaya sumando ahora. Lo que me parece terrible es que quien se acaba de sumar es quien quiere inventarse el pasado de resistencia que ha tenido. Internet no miente, todo lo que se ha hecho, está ahí”.
Y figuras que recordar
“Y hay a alguien a quien hay que recordar: si se habla de la diáspora vasca hay que hablar de José María Calleja. Calleja en aquellos años estaba en ETB y siempre estaba ayudando. Siempre daba la cara. Y luego ves que se queda en la calle por haber dado la cara: si se habla de la diáspora vasca hay que hablar de él”. Después, hay casos como el de Ernesto Ladrón de Guevara, delegado en Álava, que tuvo problemas con la política lingüística y enfrió sus relaciones con el PSOE, y ahora la política lingüística es un problema por el que protestamos muchos”.
Los principios, de la izquierda
“Y no hay que negar algo que a muchos les puede molestar: los principios morales con los que más daño se ha hecho a ETA vienen de argumentos de la izquierda: con lo de la unidad de España no se iba a ninguna parte; es cuando se defiende la libertad, la igualdad, los derechos humanos y los valores ciudadanos cuando más daño se les hace. Y eso le puede fastidiar mucho a la derecha. El propio concepto de España se legitima cuando se convierte en un sinónimo de igualdad y libertad. Si la palabra España se invoca desde una reivindicación esencialista, no se va a ninguna parte”.
Con los pies en la tierra
Lo que pocos medios han dejado traslucir es la otra militancia de Iñaki Ezkerra, a la que El Plural dedica un breve espacio. Aunque desde posturas conservadoras se critica, en general, la figura del poeta “por no tener los pies en la tierra”, no se debe olvidar que el origen del Foro de Ermua era más intelectual que de otro tipo, con los casos de Vidal de Nicolás o Savater como referentes. Ezkerra, por su parte, no ha perdido el tiempo y publicó hace unos meses su sexto libro de Poemas -es además articulista y ensayista-, titulado “A tu lado en Islandia”, un libro en el que hay poesías que no dejan a nadie indiferente: “No ha gustado a muchos meapilas", afirma a este diario su autor.
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