Nuevamente nuestro paisano Joaquín Leguina vuelve a ser noticia, no solo por sus críticas declaraciones, sino porque acaba de presentar su libro "Cuernos retorcidos".
Siempre crítico con la política territorial de ZP, aunque obediente a la disciplina de partido (votó SI al infumable Estatuto de Cataluña), Leguina ha expresado claramente su desacuerdo con los planteamientos nacionalistas plasmados en estatutos como el catalán, y los que le vienen siguiendo.
Siempre polémico, denostado por sus compañeros de partido que le consideran un viejo chocheante, en tanto que otros le consideran un traidor (por votar SI al Estatuto de Cataluña, con el que había mostrado claramente su desacuerdo), despreciado por los nacionalistas y separatistas, es en cambio una de las pocas voces libres que quedan al socialismo en España hoy en día, al haberse retirado de la política activa.
Hace unos días estuvo en Telemadrid, hablando de lo humano y lo divino, y expresando sus opiniones sobre el nacionalismo, con las que coincido plenamente, aunque lamento que no sean compartidas por sus correligionarios.
Leguina en Telemadrid: 'En política hay más colmillos retorcidos que cuernos'
El programa de entrevistas de actualidad EL CÍRCULO A PRIMERA HORA que, de lunes a viernes, emite TELEMADRID a las 9:00 horas, recibió el 24 de noviembre la visita del escritor y ex político Joaquín Leguina, quien aseguró que "en política hay más colmillos retorcidos que cuernos".
Acaba de publicar el libro "Cuernos retorcidos", una recopilación de artículos y textos inéditos donde Joaquín Leguina trata diversos temas, desde el amor, a la política de Rodríguez Zapatero o la administración del Estado. "He dejado las instituciones publicas pero no la política. Si la política dependiera más de la gente que no está en las instituciones, sería otra cosa. Yo siempre he dicho bastante lo que me da la gana, ahora lo que voy a decir lo haré con mucha más soltura de cuernos".
Por ejemplo, Leguina opina que el juez Garzón "ha judicializado a los muertos de la Guerra Civil". "Le llevo siguiendo desde hace algunos años y Garzón me parece una plaga, una plaga judicial como cualquier otra. En cuanto a la instrucción de sus juicios, los que saben de eso dicen que lo hace fatal pero no me voy a meter en eso, ahora bien en sus intenciones políticas sí, y ahí debo decir que con algunas puedo estar de acuerdo pero jamás en cómo las lleva a cabo. Estoy de acuerdo en que toda familia tiene el derecho a enterrar dignamente a sus muertos y ese derecho está amparado por el Estado, pero de ahí se ha pasado a una causa penal contra quién, ¿contra quiénes mataron? Eso está amnistiado por una Ley promovida por la izquierda que significó el final de la Guerra Civil. Fue un 'hasta aquí hemos llegado', que aquella tragedia quedara en nuestras memorias personales y en nuestra historia pero no en la política. Pues ahora resulta que eso fue una cosa mal hecha, llena de cobardías y que se hizo porque había ruido de sables. Eso es absolutamente mentira. Y es un insulto para quien estuvo en el Congreso en aquéllos momentos".
El ex Presidente de la CAM no está de acuerdo con el revisionismo de la Transición que algunas figuras de su partido apelan. "La Constitución del 78 se aprobó por consenso ¿les parece poco? Nunca hubo en España una Constitución por Consenso, ni la de 1812 ni la de 1931. Esta nos dura 30 años. No sé qué revisionismos hay que hacer aunque, evidentemente, hay cosas en la Constitución que son mejorables, sin menor duda, el título 8". Es decir, el referente al modelo administrativo del Estado, que en su opinión, "está sin cerrar y nos traído más problemas que soluciones porque, problemas políticos graves en España no hay excepto los que se generan por este asunto y los nacionalismos periféricos. Ya lo dijo Ortega y Gasset durante la República, que era algo que deberíamos aprender a conllevar, pero conllevar no significa que nos bajemos los pantalones siempre los mismos. Tanto el gobierno como la oposición cuando hablan de nacionalismo, se la cogen con papel de fumar", afirma Leguina que achaca esta situación también a la Ley electoral que obliga a los partidos mayoritarios a apoyarse en los nacionalistas para poder gobernar.
"La reforma no es fácil. Si queremos cambiar el modelo electoral, lo lógico sería pasar del sistema proporcional corregido a un sistema mayoritario con lo que nos evitaríamos los cambalaches postelectorales", dijo el escritor quien considera que una consecuencia perversa del sistema de las autonomías ha sido "la falta de orden y coordinación en las administraciones públicas. Es intolerable que un funcionario andaluz cobre más o menos que uno madrileño. Cuando eso sucede, esto es un desmadre".
La última función que Joaquín Leguina ha desempeñado en su partido ha sido la de diputado en el Congreso donde la semana pasada se produjo una cierta polémico dada la oposición del PSOE a que se instalara una placa a Sor Maravillas en el edificio de la Cámara, en cuyo emplazamiento la Santa habría nacido. "¿A quién dedicamos las placas? A las personas que han llegado a la excelencia en su oficio, ya sea pintor, político o monja. Esta mujer llegó a la excelencia porque es Santa, por lo tanto, tiene todo el derecho a tener su placa. Todo este lío se monta porque algunas personas de la izquierda confunden laicimos con anticlericalismo", sentenció Leguina quien recordó que el mismo día que se produjo esta polvareda, el gobernador de España "dijo que, para salir de la crisis, es necesario bajar los salarios y ni una sola voz socialista se ha levanto para decir esta boca es mía".
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