Frases para ciudadanos:

"Todos hemos nacido iguales, y los derechos de cada individuo disminuyen cuando los derechos de uno solo se ven amenazados". (J.F. Kennedy).

"Nada hay más poderoso en el mundo que una idea a la que le ha llegado su tiempo". (Victor Hugo)

sábado, 30 de agosto de 2008

Revilla: 'El español nació en Cantabria'


ENTREVISTA: el tiovivo entrevista impertinente a Miguel Ángel Revilla

"El español nació en Cantabria"

Jesús Ruiz Mantilla 30/08/2008 (EL PAIS)

Tiene una facilidad innata para convertir todo aquello que dice en titular. Miguel Ángel Revilla, presidente de Cantabria, no es un político al uso. Gracioso, espontáneo, látigo del protocolo, gobierna una región de 500.000 habitantes con formación propia (el Partido Regionalista de Cantabria) en coalición con el PSOE. Va en taxi a la Moncloa y es colaborador de Buenafuente. Su misión: vender su tierra. Todo le vale. ¿Lo último? El idioma. Según él, la cuna del español no está en La Rioja: "Gonzalo de Berceo tergiversó la historia. San Millán de la Cogolla lo inventó aquí", dice en su despacho de Santander.

Pregunta. En Comillas han impulsado un centro del español. ¿Era necesario recurrir a barbaridades para promocionarlo como la de que el idioma tiene su cuna en Cantabria?

Respuesta. No lo digo yo. No soy el experto. Es un equipo de la Universidad de Tennessee (Estados Unidos) que lleva años en Valderredible con el profesor Kaplan excavando con picachones.

P. ¿Y qué dicen?

R. Pues que Gonzalo de Berceo adulteró la historia y puso a san Millán en Logroño cuando estuvo en Valderredible toda la vida. Lo hizo intencionadamente.

P. ¿Por qué querría hacerlo el hombre?

R. Porque en aquella época el negocio eran las reliquias. Hoy a los turistas les atrae una buena playa; entonces eran las reliquias y Berceo quiso llevarse las de san Millán a su pueblo. No se me escapa que las Glosas Emilianenses están allí, pero lo que dice el profesor Kaplan es que el idioma nace en Valderredible, donde san Millán pasó toda su vida. Y eso es incontestable.

P. Los de La Rioja se habrán puesto buenos. Primero se chiva usted de que su presidente ha filtrado a la prensa cosas internas de una reunión con Zapatero y ahora esto. ¿Le pegarán?

R. Encima, si me dan a elegir, prefiero el Ribera del Duero. ¿Qué le voy a hacer? ¡Que se busquen otro Kaplan! No voy a decir yo que es un pirao. ¡Viva Kaplan! No veas, es un tío riguroso. No sabes la chapa que mete allí.

P. Del lema oficial "Cantabria infinita" al suyo de "Cantabria me pone", me quedo con el segundo. ¿Qué le pone más a usted?

R. Eso surgió en esos momentos en que no sabes que decir y puede salir una barbaridad. Habló Pasqual Maragall, que veranea por aquí y dijo que yo no lo podía entender, pero que a un catalán le hablabas de Cataluña y se le erizaba el pelo. Entonces yo solté aquello y después que también me ponía España. Luego han hecho camisetas y todo.

P. ¿Encaja un presidente autonómico en un programa de televisión como colaborador?

R. A mí me da igual. Soy libre. Pero en este mundo globalizado es muy difícil venderse y mi obligación es vender Cantabria como pueda. Aunque es fácil.

P. No me diga.

R. Pues claro. Esto no es el Páramo de Masa. Aquí tenemos buena gente, no somos xenófobos, en una hora y cuarto podemos tocar la nieve y bañarnos en el mar, se come de lujo: hay sobaos, quesadas, anchoas... De los 40 patrimonios de la humanidad que hay en España, 10 están aquí.

P. Vale, vale. ¿Cuánto cuesta un taxi del aeropuerto al palacio de la Moncloa?

R. Entre 26 y 29 euros. Ahora no hay problema, todo el mundo sabe que llego en taxi, pero hasta que se acostumbraron... Lo malo es que el 90% tienen puesta la Cope. Cuando nos acercamos, les advierto: al llegar, apáguela, por lo menos.

P. ¿Ya han empezado a aceptar los más pijos de Santander esas peculiaridades suyas o no tragan?

R. Yo soy el antipijo. No voy rompiendo el aire con el pecho. Soy de pueblo, pero si hay que ir a la boda del Príncipe en frac, voy, eh. La educación es lo primero. Pero sigo subiendo a ver a san Cipriano en albarcas. No hago maratones con playeras Reebok. Hago carreras en albarcas. Y he ganado unas cuantas.

P. ¡A la mierda el protocolo!

R. Bueno, yo no insulto. Sólo a los psicópatas de ETA y a los nacionalismos sabinianos.

P. De los inquilinos que ha conocido en La Moncloa, ¿con quién se queda?

R. Con Zapatero. Aznar era muy serio. Me reuní con él una vez. Estuvimos tres cuartos de hora y yo hablé 43 minutos. Zapatero habla mucho, igual más que yo. Es un hombre muy bienintencionado. Quizá demasiado optimista, pero prefiero eso a un triste.

viernes, 29 de agosto de 2008

Julio Anguita es partidario del derecho de autodeterminación

Él sí, ya nos lo dejó bien claro a quienes asistimos hace un año al curso que organizó el Foro Ermua en Laredo (curso del cual publicaré en breve las ponencias de las magistrales lecciones a las que asistimos). Pero Julio Anguita olvida, intencionadamente, que ese derecho solo se refiere, según la resolución correspondiente de la ONU, a ex-colonias, no es aplicable en el caso de las pretendidas reclamaciones de algunas regiones de España, que nunca fueron conquistadas ni oprimidas por ejército invasor alguno.

Julio Anguita: 'Hay que iniciar un proceso que conduzca a la Tercera República'

  • 'Soy partidario del derecho de autodeterminación. Es absurdo el miedo al referéndum'

  • 'Tras tantos intentos, hay que concluir que acabar con ETA es una cuestión de jueces'
ESTHER ESTEBAN (EL MUNDO)

Se hizo con la Alcaldía de Córdoba en 1979, siendo la primera capital de provincia gobernada por el PCE desde la II República. El califa rojo saltó desde allí a la política nacional al frente de Izquierda Unida. Bajo su liderazgo, entre 1989 y 2000, la coalición obtuvo sus mejores resultados. Famoso por la pinza contra el PSOE y por su programa, programa, programa, pide ahora una refundación de IU para sacarla de la crisis.

Estos son algunos extractos de la entrevista con el antiguo líder de IU:

"Este país sigue siendo el reino de la corrupción, del robo y de la impunidad para los grandes".
"El Rey estaba en la pomada y aceptó un golpe de timón más parecido a la 'dictablanda' de Primo de Rivera que a lo de Tejero".
"Hay que ponerse con paciencia a iniciar un proceso que conduzca a la Tercera República española".
"La Generalitat de Cataluña y la 'Lehendakaritza' son Estado español, les guste o no".
"Los que tienen que velar por la Constitución no tienen fuerza moral, porque están atados por los pactos".
"El PSOE ha conseguido que a su izquierda quede un inmenso campo, y sin jornaleros que lo trabajen".


Y estas son algunas de las preguntas más destacables:


Pregunta: […] Esta ha sido la primera Constitución aprobada por todos los partidos. ¿La forma en que se desarrolló el Título VIII, sobre la organización territorial, fue la correcta?
Respuesta: El problema de la Constitución fue que se intentó hacer a base de remiendos y de peticiones. De una parte lo que reclamaba la oposición, como el tema de las nacionalidades, que se aceptó sin calibrar sus competencias, y de otra, las apetencias partidistas de cada uno. El PCE acepta la Monarquía, la bandera, y una ley que era clarísimamente injusta contra nosotros, la Ley electoral. Hay un momento en que nos creemos que de esa Constitución realmente se puede sacar fruto, pero no ha sido así. Ha pasado el tiempo y ahora se ha demostrado las carencias que tiene.


P.: ¿Y hacia dónde hay que cambiarla?
R.: A mí esta Constitución me da igual. Es más, yo me he comprometido en un manifiesto republicano a que si vuelvo a ser concejal, diputado o cualquier cargo público prometería la Constitución con la fórmula de por imperativo legal, porque me siento totalmente desvinculado de ella. En estos momentos hay que ponerse con paciencia a iniciar un proceso constituyente que conduzca a la Tercera República española. Estoy convencido de que España mañana será republicana. Y en absoluto considero la Tercera República heredera de la Segunda, sino otra de nuevo cuño que debe tener una visión federal del Estado, porque lo de hoy es un gazpacho indecente donde las reformas de los estatutos se han hecho como apaños para apoyar a los sucesivos presidentes del Gobierno.

P.: Vamos, que el Estatuto catalán es una chapuza…
R.: ¡Una gran chapuza! El error ha sido modificar estatutos sin modificar la Constitución, con lo cual hemos llegado a una especie de monstruo de Frankenstein hecho a pedazos. Yo planteo una Constitución federal que para mí es un estado unitario, porque en la medida en que se acepta el Estado federal los distintos estados o comunidades son parte del Estado español. La Generalitat de Cataluña es Estado español, les guste o no. Y la Lehendakaritza es Estado español, les guste o no, porque el Estado español tiene tres administraciones: la local, la autonómica y la nacional. Por eso, cuando hablamos de la negociación del Estado con las autonomías se comete un error. Será la negociación entre la Administración central y la autonómica.

P.: Pues IU del País Vasco ha sucumbido en la trampa del nacionalismo, ¿no?
R.: Soy partidario del derecho de autodeterminación, y nunca me ha dado miedo nadie que se confiese nacionalista o independentista, y menos que decidan los ciudadanos. Yo siempre le he imputado al Gobierno central la falta de valor para asumir esto. Mi idea es un Estado unitario, donde la caja única y las decisiones de política económica son de la federalidad del Estado, que tiene que garantizar igual servicio para todos los ciudadanos del país, hablen la lengua que hablen. Y en esas condiciones, ¿nos interesa unirnos? Que hable el pueblo. Lo absurdo es tener a un referéndum un miedo pavoroso, cuando la autodeterminación no es a la defensiva, sino a la ofensiva.

P.: Y llegados a ese punto, ¿la soberanía dónde reside?
R.- En el pueblo. La soberanía reside, si llegamos a un acuerdo sobre el estado federal, en el conjunto de la población de España. Para que el pueblo vasco se pueda autodeterminar, el pueblo español, con la Constitución en la mano, tiene que dar esa capacidad, y lo sigo manteniendo. ¡Estoy harto de este sempiterno juego! Por una parte utilizan la presión nacionalista para tener unas ventajas, y por otra usan la presión de la España unida para tener otras distintas. Ha llegado el momento de ver qué ocurre, y dar un paso claro para que España no se siga desangrando.

jueves, 28 de agosto de 2008

El español: la fuerza de un idioma global (J.L. García Delgado) (y II)

Una vez puestos en antecedentes, a continuación traslado a este blog mi resumen personal de la magistral conferencia impartida por el profesor José Luis García Delgado, el pasado 20-ago-08, en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, de Santander.


Preámbulo:

El título original previsto para la conferencia era “Economía del español, economía en español”. No obstante, el director del curso (el escritor y periodista Jesús Ruiz Mantilla) sugirió el título actual (La fuerza de un idioma global), al cual trataremos de adaptar la exposición.

Por otro lado, cabe reseñar que el profesor García Delgado está dirigiendo un equipo de investigadores en la Universidad Complutense de Madrid, bajo los auspicios de la Fundación Telefónica, con el objeto de valorar cuantitativamente el valor económico del español (ver post anterior).


LA FUERZA DE UN IDIOMA GLOBAL

La presente exposición se basa en los siguientes 3 ejes básicos:

A) Motivos de la “acrecida” fuerza del idioma español: se trata de una lengua franca en la península ibérica desde que se empezó a hablar, allá por el siglo XI, acogiendo influencias del vascuence y otras lenguas locales sobre el latín. Más adelante, vendría la expansión a Iberoamérica, y su evolución al otro lado del océano. Podemos, sin lugar a dudas, afirmar que actualmente vivimos una “época dorada” del español.

Podemos citar como principales factores de esta “acrecida”:

- Crecimiento de la demanda para su estudio como 2ª lengua. El español tiene suficiente atractivo como para ser demandada como segunda lengua. En USA, Brasil, en Asia (poco a poco), e incluso en Europa (como 2ª lengua extranjera, después del inglés).

- No es una ‘acrecida’ casual, azarosa, sino que obedece a ciertas circunstancias:

1) Es una lengua de comunicación internacional. Hay factores que benefician a todas las lenguas de comunicación internacional:
- Globalización / mundialización: la multiplicación de movimientos económicos, de población (en todo el mundo).
- Crecimiento económico internacional: el crecimiento internacional (50% del PIB mundial viene de los países emergentes).
- Sociedad del conocimiento: ósmosis culturales.

2) El buen momento de los últimos decenios en España (desde mediados de los 80), con crecimiento económico, que ha hecho que el país haya ganado en atractivo.

3) La internacionalización empresarial: el lenguaje común facilita la intercomunicabilidad y la internacionalización económica.

4) La R.A.E. ha homogeneizado el español (gramática, fonética, ortografía), lo que facilita su extensión mundial, y su aprendizaje.

- En 1998 se celebra en Zacatecas (México) el I Congreso Mundial de la Lengua Española, el cual decide reunirse cada 3 años. A raíz de este congreso se normaliza y organiza el conocimiento del idioma español, que culmina en la elaboración del Diccionario Panhispánico, auténtico hito en la historia del español como idioma, abierto a las influencias del resto de países de habla hispana.

B) El español es una fuerza con alto valor económico, mensurable. Por ello, es posible valorar el % del PIB que corresponde a la lengua española, el cual se estima en un 15%. En este sentido, cabe resaltar que el primer autor de este estudio fue el biólogo Ángel Martín Municio, al cual se le ocurrió esta idea para presentarla en el Congreso de la Lengua Española que se celebró en Valladolid en 2001.

La lengua es materia prima de determinadas industrias, y elemento básico en muchas otras. Este trabajo se editó en 2003 (por el Instituto Cervantes), con el título: “El valor económico de la Lengua Española”.

Este buen trabajo lo que no capta es lo que tiene la lengua de elemento de comunicabilidad internacional. Actualmente, el equipo de investigadores dirigido por el profesor García Delgado está “afinando” los coeficientes del cálculo, el % sobre el empleo, y tratando de distinguir qué le diferencia de otras lenguas, en factores como: migraciones (es obvio que en los hispanoamericanos influye decisivamente a la hora de elegir país de destino), intercambios comerciales, etc. Hasta el momento actual, los valores obtenidos tienden más hacia la cifra de un 16% del PIB, si bien el valor definitivo resultante del estudio se conocerá hacia marzo de 2009.

En definitiva, se trata de conceptualizar en términos económicos lo que es la lengua española. Es evidente que cuantos más la hablen, más valor tendrá el producto lengua española. Este producto también tiene externalidades, y sus usuarios pueden considerarse como “miembros de un club”: tiene costes de acceso para quienes no lo conocen (el coste de los cursos de aprendizaje).

C) El español es un valor que hay que alimentar, una fuerza que debe cultivarse. La dimensión del “club” de los que hablan español es fundamental para aumentar su valor, y cuanto más atractivo sea este, mejor. Para ello, están las políticas de promoción, para dar prestigio a este “club”, y acrecentar su atractivo, su “pedigrí”, mediante:
- Instituto Cervantes, como institución oficial.
- La calidad del idioma, gracias a su normalización.
- Los directores del I. Cervantes establecen un diploma estandarizado de conocimiento del español, con idénticos requisitos en todo el mundo.
- La calidad de nuestras instituciones, el tejido social que utiliza el español, etc.

Además, en este sentido, cabe aludir a la responsabilidad de los creadores (cineastas, literatos, periodistas, novelistas, etc.), para dar más prestigio a este club de usuarios de la lengua española.

A raíz de lo comentado, y vista la imparable evolución de la lengua española, resulta totalmente factible plantearnos como objetivo (a 20 ó 30 años) que el español sea una segunda lengua franca a nivel mundial, por detrás tan solo del inglés.


EPILOGO FINAL: Según afirmó el profesor García Delgado, a raíz de la evolución lingüística reciente en nuestro país, "las lenguas deben servir para unir, no para desunir; para derribar fronteras, y no para establecer nuevas fronteras a los ciudadanos".

Si bien una lengua presenta inevitablemente una función identitaria, es necesario que lo identitario no vaya en detrimento de la lengua común (el español), lengua de comunicabilidad internacional. Debemos conservar el bien de las lenguas comunes. Es nuestra responsabilidad ante las generaciones presentes y futuras.

miércoles, 27 de agosto de 2008

El español: la fuerza de un idioma global (J.L. García Delgado) (I)

El 20-ago-08 tuve el placer de asistir a la magistral conferencia del profesor José Luis García Delgado en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, en Santander, bajo el título de "Español: la fuerza de un idioma global", que más adelante transcribiré.

Antes de entrar en materia, quiero presentaros a
José Luis García Delgado, catedrático de Economía Aplicada en la Universidad Complutense de Madrid.

Nace en Madrid (enero de 1944), donde estudia Economía y Derecho, e inicia en 1967 su trabajo como profesor de Economía Española. La docencia la ha ejercido ininterrumpidamente durante los últimos treinta y cinco años en la Universidad Complutense (primero como profesor no numerario, entre 1967 y 1976, y luego como catedrático de Economía Aplicada a partir del comienzo de los años 80, siendo director del Departamento de Estructura Económica y Economía Industrial desde 1981 a 1995) y en la Universidad de Oviedo (entre 1976 y 1981). Ocasionalmente, ha explicado también cursos de doctorado y seminarios monográficos en casi todas las Universidades españolas y en Universidades europeas y de Iberoamérica, pronunciando también centenares de conferencias en diversos foros académicos.

García Delgado ha sido durante 10 años Rector de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), y es Académico electo de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, además de Doctor Honoris Causa por varias universidades.

Como investigador, ha cultivado preferentemente el análisis de la industrialización española en el curso del siglo XX y el estudio de determinados capítulos del pensamiento económico y social español contemporáneo. Ha publicado más de un centenar y medio de títulos.


El valor económico del español

En mayo de 2008, el profesor José Luis García Delgado presentó el libro que ha dirigido, junto con los también profesores universitarios José Antonio Alonso y Juan Carlos Jiménez, sobre “Economía del español. Una introducción”; libro que pertenece al estudio promovido por la Fundación Telefónica “El valor económico español: una empresa multinacional”.
La investigación aspira a cuantificar toda la actividad productiva o de intercambio que, en la economía española y en la del conjunto de los países de habla hispana, encuentra en la lengua algún tipo de contenido relevante o de soporte significativo.
También aspira a crear opinión sobre la importancia y el carácter estratégico de este activo intangible para España y la comunidad panhispánica de naciones. García Delgado defiende un mayor esfuerzo en innovación y ciencia para intentar aumentar la presencia del español en Internet.

Como paso previo a la ponencia presentada en la UIMP, merece la pena leer detenidamente el texto del trabajo presentado por el profesor García Delgado y J.A. Alonso en el congreso celebrado en Valladolid en 2001.

La potencia económica de un idioma: una mirada desde España

II Congreso Internacional de la Lengua Española, Valladolid, octubre de 2001
José Luis García Delgado y José Antonio Alonso


La economía como disciplina científica nació con la industrialización. No es extraño, por tanto, que en su discurso haya dominado un cierto sesgo productivista, que otorga a los factores y recursos materiales, respecto a otros posibles activos intangibles, un papel preferente en la explicación del progreso económico. En el curso del último medio siglo, y muy especialmente a partir de la década de los setenta, esta visión comenzó a cambiar, al advertirse la importancia que en el comportamiento económico tienen variables sociales de carácter no material, relacionadas con el marco institucional y de incentivos disponible, con el cuadro de valores que informa a las personas, con las relaciones que los agentes sociales traban entre sí y con los conocimientos que se acumulan no sólo en las máquinas, sino también en los individuos y en las organizaciones.

Al concepto de capital físico, variable central en las explicaciones tradicionales del crecimiento económico, se fueron añadiendo los términos de capital humano, que expresa los niveles de formación y capacitación de las personas, de capital natural, asociado al patrimonio de recursos aportado por la naturaleza, y de capital social, que alude a los niveles de confianza social, al grado de asociacionismo, a la conciencia cívica y a los valores culturales dominantes en la sociedad. Junto a ello, hoy se insiste más que antaño en el papel crucial que para el progreso económico tiene la existencia de un marco institucional y normativo adecuado, al tiempo que se reclama como condición de desarrollo el establecimiento de una situación efectiva de buen gobierno. Se abre espacio así a factores intangibles relacionados con las instituciones, los saberes, las normas y los valores colectivos en la explicación del progreso.

Es importante subrayar este cambio, no sólo por el enriquecimiento que comporta en la teoría económica, al ampliar el espectro de sus preocupaciones analíticas, sino también por los puentes que de este modo proyecta hacia otras disciplinas y ámbitos de la reflexión humana. Remedando una terminología extraída de la informática, cabría decir que si la reflexión económica en el pasado se centró sobre el hardware productivo de los países, hoy dedica una más destacada atención al software de las sociedades: de la realidad tangible y exteriorizada de los recursos productivos al universo menos material de las instituciones, las políticas, los conocimientos y los valores. Y, al igual que el software informático se configura y expresa al modo de un lenguaje, también la lengua, el idioma define y articula buena parte de los factores intangibles más relevantes de una sociedad.


La lengua como bien público

El papel central que la teoría económica atribuye al mercado ha alentado, en ocasiones, visiones excesivamente reductoras de la realidad social, que dañan la riqueza analítica e interpretativa de la disciplina. De hecho, alguno de los más notables extravíos de la ciencia económica deriva de esa abusiva sinécdoque que supone entender que no hay otro mecanismo de asignación y coordinación social eficiente que el mercado o que no existe más universo que el de los bienes aptos para su transacción mercantil.

En la realidad económica existen numerosos bienes —los llamados bienes públicos y semipúblicos—, algunos de muy destacada utilidad social, que no se ajustan a semejante patrón, por no ser excluibles, al no poderse determinar fácilmente la compensación que se requiere para acceder a su titularidad —el precio—; y por no ser rivales, al estar disponibles para todos de una forma no limitada una vez que son producidos. Estas características limitan el estímulo que los potenciales consumidores tienen para asumir, de forma espontánea, el coste equivalente a su producción. Son bienes, por tanto, que no pueden ser dejados a la gestión del mercado, siendo necesario el recurso a la acción social coordinada para regular su provisión y consumo.

La lengua tiene, como se habrá advertido, gran parte de las características propias de un bien público. Se trata de un bien no excluible, ya que no cabe atribuir un precio que limite el acceso a su titularidad y consumo; y es, desde luego, un bien claramente no rival, en la medida en que el uso del idioma por parte de un determinado agente no impide similar práctica por parte de consumidores rivales. Es más, cabría decir que la potencialidad de los servicios que la lengua proporciona se amplifica en la medida en que aumenta el número de las personas que recurren a su utilización.

De acuerdo con las características señaladas, la regulación del uso de la lengua, su protección e, incluso, su provisión no puede ser dejada al cuidado espontáneo del mercado, debiendo ser asumida por las instituciones públicas. Acaso la anterior expresión puede suscitar la sorpresa de muchos. Es claro que la protección de un idioma —caso de considerarse necesaria— debe corresponder a instituciones con capacidad normativa, pero ¿cabe extender semejante responsabilidad al ámbito de la producción idiomática? ¿No es acaso cierto que el idioma se produce de forma espontánea, a instancias de la expresión popular, como resultado de la vitalidad comunicativa de las gentes?

Si por producción lingüística se entiende la generación de nuevos recursos expresivos, nuevos giros idiomáticos o nuevas voces y vocablos, habrá que convenir en que es la calle su principal factoría. No obstante, la potencia comunicativa de un idioma, su fortaleza y funcionalidad, dependen de la capacidad que una comunidad tiene para convertir su lengua en un elemento de identidad y en un polo de referencia y atracción para grupos ajenos; lo que, a su vez, está en relación con la amplitud, riqueza intelectual y vitalidad creativa de la comunidad social que la respalda. Dicho de otro modo, la potencialidad de un idioma depende, por un lado, de la capacidad que la lengua tiene para erigir lazos identitarios en el seno de la comunidad que la practica y, por otro, de la vitalidad creativa e intelectual y de la ascendencia internacional de dicha comunidad. Ha de convenirse en que los poderes públicos tienen una notable responsabilidad en la promoción de todos estos factores.

Pero el propósito de este artículo no es sólo justificar la importancia que tiene la acción pública para amplificar la funcionalidad y potencia de un idioma: se propone sugerir, además, que la tarea de engrandecer un idioma si tiene un indudable interés cultural, tiene también un muy destacable interés económico.


Funciones económicas de la lengua

No es fácil identificar de una manera precisa aquellas funciones que la lengua cumple desde una perspectiva económica: su papel como elemento de cohesión de una comunidad, como factor de identificación y de vertebración colectiva, dificulta semejante tarea de disección. No obstante, es posible avanzar en la reflexión, señalando alguna de sus funciones más señaladas. Entre ellas habría que entresacar las cuatro siguientes.

a) La lengua como mercado

Una de las primeras y más inmediatas dimensiones económicas de la lengua alude a la enseñanza del idioma como actividad mercantil, ámbito propicio para la generación de iniciativas empresariales. En este caso, el soporte de los bienes y servicios sobre los que se constituye el mercado es el propio idioma: es decir, la enseñanza de la lengua y el adiestramiento en su uso. Es el idioma, por tanto, materializado en un conjunto de bienes requeridos para el proceso formativo (libros, diccionarios, materiales pedagógicos complementarios,...); y de servicios asociados a la enseñanza (centros docentes, viajes organizados, estadías, profesorado,...). La profundidad y amplitud de este mercado depende muy crucialmente de la dimensión y utilidad internacional del idioma, ya que es el resto de la comunidad internacional —más que la titular de la lengua— quien determina la demanda básica. Una demanda que va a estar influida por la capacidad creativa, la influencia económica y política y la ascendencia intelectual de la comunidad lingüística en cuestión.

La experiencia anglosajona puede constituir un adecuado ejemplo de lo que se sugiere: tanto en Estados Unidos como en el Reino Unido existe un vigoroso sector de la actividad empresarial vinculado a la enseñanza de la lengua, que acoge centros de enseñanza, actividades de preparación de profesorado, publicaciones en muy variados soportes, organización de viajes y servicios de acogida para los alumnos. Una actividad que se despliega tanto en el propio país como en mercados ajenos, alentando una fecunda vía para las relaciones internacionales.

Por lo que atañe al español, las posibilidades son notables, aun cuando resta mucho por hacer en este ámbito. Cada vez son más las personas que integran el español entre sus preferencias lingüísticas, tanto en Europa como en Estados Unidos o Japón. La reciente declaración de segunda lengua de enseñanza obligada en las escuelas de Brasil, la existencia de más de 30 millones de hispanohablantes en Estados Unidos o el atractivo económico y cultural de los mercados español e iberoamericano, llamado a seguir una senda ascendente en el tiempo, son factores, entre otros, que contribuyen a despertar el interés creciente por un correcto aprendizaje del español. Pero, la escasa dotación de ofertas formativas atractivas, en las que se combine el aprendizaje del idioma con otras actividades complementarias de carácter turístico y cultural, hace que sea todavía muy limitado este mercado tanto en España como en el resto de los países hispanohablantes. No obstante, se trata de una de las vertientes económicas más inmediatas de la potencia de un idioma.


b) La lengua como soporte de la creación: la industria cultural

Las posibilidades económicas de un idioma no se agotan en este primer ámbito relacionado con su difusión y enseñanza: necesariamente deben considerarse también las posibilidades que aparecen asociadas a la comercialización de aquellos productos que descansan de modo central en el idioma. Es el caso, en primer lugar, de aquellos ámbitos creativos cuyo soporte básico es la lengua, como la literatura, la canción, el teatro o el cine; afecta también a las actividades profesionales que dependen del recurso idiomático, como puedan ser las desempeñadas en los medios de comunicación, en sus diversas especialidades y soportes (prensa escrita, radio o televisión); y, en fin, llega a incidir también sobre aquellos ámbitos relacionados con la difusión y divulgación de la producción científica e intelectual (investigaciones, estudios, ensayo). En la mayor parte de los casos aludidos no puede decirse que el idioma sea la materia misma de las transacciones, pero constituye un soporte crucial para definir su contenido.

Conviene advertir que, al contrario que en la función precedente, en ésta el mercado lo conforma la propia comunidad hispanohablante, si bien con posibilidades de extensión a otros ámbitos lingüísticos que se sientan atraídos por la producción específica en español. La capacidad para ensanchar ese mercado dependerá crucialmente de la originalidad y vitalidad creativa que en los ámbitos señalados tenga la comunidad hispanohablante, por una parte, y de la capacidad de la industria para convertir esas creaciones en productos accesibles y atractivos en los mercados, por la otra. Si el primer factor es importante, el segundo es igualmente decisivo: por mucha que sea la creatividad de un pueblo, el mercado derivado de sus producciones artísticas e intelectuales quedará limitado si no existe una industria cultural suficientemente poderosa como para difundir y rentabilizar el esfuerzo. Por lo demás, la existencia de esa industria, si no garantiza la calidad de las creaciones, sí estimula su producción, contribuyendo de este modo a ampliar el vigor creativo de la comunidad.

El despliegue de la industria cultural no debe entenderse como una tarea encomendada a los poderes públicos: es función de la iniciativa privada (editoriales, productoras, empresas de comunicación, ...) identificar las oportunidades de negocio que se abren en este campo. Si bien debe ser el sector público el que establezca el marco normativo y de apoyo a la industria para hacerla viable. Especialmente en el caso de aquellas producciones creativas más innovadoras y arriesgadas, en aquellas de mayor interés social o en las que comportan costes difícilmente recuperables.

Cabe decir que el progreso que experimentó España en este ámbito ha sido verdaderamente destacable, especialmente en el caso de la producción editorial y de la comunicación, donde es muy notoria la presencia de poderosos grupos empresariales con proyección más allá de las fronteras nacionales. Sólo en España se registra una producción editorial cercana a los 62.000 títulos al año; a los que hay que añadir los 90.000 editados en América Latina, más de 40.000 en lengua española. Lo que da idea de un mercado amplio y con un potencial de dinamismo notable. Para España esta producción es fuente de un próspero comercio internacional, exportándose tres veces y media el valor de lo que se importa; al tiempo que se mantiene a lo largo del tiempo una modesta pero continuada acción inversora en el exterior. De hecho, el sector editorial concentra en torno al 1 por 100 de las exportaciones españolas y cerca del 0,7 por 100 de las inversiones en el exterior como promedio de los últimos cuatro años.


c) La lengua y los costes de transacción

Una tercera dimensión económica de la lengua es la que se deriva de la reducción que en los costes de transacción tiene el recurso a un medio de comunicación compartido entre las partes: se trata de uno de los beneficios económicos de la comunidad de lengua menos explorados pero más significativos. Se entienden como costes de transacción aquellos en que incurren los agentes como consecuencia de las tareas de identificación y conocimiento entre las partes, de negociación de las condiciones del intercambio y de fijación de las garantías y compensaciones en caso de incumplimiento. Estos costes pueden ser elevados cuando se trata de una operación económica compleja, como pueda ser la provisión de un bien de equipo con especificaciones técnicas precisas, un acuerdo de cooperación interempresarial o un proyecto de inversión directa.

En razón a su naturaleza, la magnitud de los costes de transacción depende de la capacidad de comunicación y de entendimiento entre las partes: de ahí las ventajas que proporciona la pertenencia de ambas a una misma comunidad idiomática. No sólo por la incomparable ventaja que proporciona para la comunicación, sino también por el papel central que el idioma tiene —a continuación se insistirá en ello— en la generación de valores, hábitos y marcos institucionales compartidos. De ahí que la presencia de un idioma común constituya un poderoso mecanismo para reducir los costes de transacción, facilitando los procesos de internacionalización económica.

Semejante evidencia inspiró una de las hipótesis interpretativas más novedosas de la secuencia de internacionalización de la empresa, que alude a la distancia sicológica entre mercados como uno de los factores que condiciona la proyección internacional. Las empresas, con el objeto de reducir los costes de transacción y los niveles de riesgo, suelen iniciar su experiencia internacional en los mercados que mejor conocen, los que perciben como más afines, aquellos con los que tienen menor distancia sicológica; y sólo se proyectan hacia áreas más remotas una vez que logran acumular experiencia y capacidades en esos escenarios más familiares. Disponer de un entorno amplio y dinámico de mercados internacionales sicológicamente cercanos se conforma como un activo valioso para el aprendizaje internacional de las empresas.

España, sin duda, confirma esta hipótesis: la internacionalización de la empresa española comenzó, y de manera muy señalada, en el ámbito de Iberoamérica y de Portugal, los dos escenarios con los que nuestro país tiene mayor cercanía lingüística y cultural. Antes incluso de haberse liberalizado la inversión en el exterior, en el entorno de los años setenta, más de la mitad de los capitales españoles se orientaban hacia aquella región americana; y el porcentaje pasa a suponer entre un tercio y la mitad de la inversión en los años más recientes. De hecho, es en los dos mercados señalados donde la presencia de intereses españoles adquiere una mayor relevancia, hasta situar a España en los primeros lugares entre los inversores foráneos. La dimensión y el potencial dinamismo de algunos mercados latinoamericanos en el futuro —más allá de las circunstancias azarosas del presente— convierten a la comunidad lingüística hispanohablante en un poderoso factor de estímulo —y en un escenario de aprendizaje— para los procesos de internacionalización de la empresa española.


d) La lengua como seña de identidad

Por último, la lengua cumple una función básica como materia envolvente de una comunidad: elemento básico de identidad colectiva y factor de diferenciación frente al resto. Abusando del lenguaje económico, cabría decir que la lengua es la más poderosa y eficaz imagen de marca de un colectivo. Como tal, el atractivo de la lengua ayuda a caracterizar el potencial económico y cultural de una comunidad, al tiempo que la ascendencia de esa comunidad incide sobre el interés internacional que despierta su lengua.

Por lo demás, a través de esa función generadora de identidad social, la lengua ayuda a moldear la cultura de una comunidad, a generar los valores colectivos que la conforman y hasta las instituciones sociales en que aquellos se expresan. Fue Wittgestein quien señaló que la frontera del saber la determina el alcance de cuanto puede ser nombrado. Sin el determinismo lógico que la anterior sentencia comporta, habría que convenir en que es también la lengua la que conforma culturas y valores. De ahí que sea tan frecuente encontrar afinidades culturales y semejanzas de orden institucional entre países de una misma área idiomática, aun cuando sus fronteras se encuentren separadas por océanos. Y todos estos factores facilitan la integración económica de los países y su proyección sobre comunidades lingüísticas ajenas.


Desarrollo y creación cultural: el caso de España

A lo largo de las páginas anteriores se ha tratado de argumentar que el respaldo a la capacidad y potencia de un idioma no es sólo una empresa de interés cultural, sino también de interés económico; y se identificaron como factores cruciales en la potenciación del idioma tanto el despliegue de la capacidad creativa de la comunidad como el desarrollo de una industria que proyecte semejantes logros y realizaciones.¿Cuál ha sido la relación entre estos dos factores en el caso español? La perspectiva histórica puede aportar algunos elementos esclarecedores en la relación entre desarrollo económico y proceso creador, entre modernización social e incidencia de la lengua y la cultura española.

A grandes trazos, y para lo que aquí interesa destacar, lo que en seguida sobresale es la diferencia entre los dos primeros tercios del siglo XX, por una parte, y el último tercio del novecientos hasta la actualidad, por la otra. Digámoslo muy sumariamente: durante los dos primeros tercios del siglo XX, el sobresaliente proceso de creación artística y cultural en España va muy por delante de la modernización económica y social, con soportes empresariales y articulación mercantil para los productos de la esfera creativa muy endebles, aunque en consonancia con una economía poco desarrollada y muy encerrada en su propio mercado interior. Por el contrario, en el curso de los tres últimos decenios, aquella relación parece haberse invertido, sobresaliendo ahora el vigor del crecimiento económico, la amplitud de la apertura exterior y el calado de las transformaciones sociales, siendo obligado, por eso mismo, disponer de nuevos soportes industriales y comerciales para que la creación artística y cultural encuentre campo apropiado para el despliegue de sus potencialidades y el aprovechamiento económico de sus logros.

Sin duda, puede tildarse de simplificador este esquema dual, que pasa por encima, entre otras cosas, de los heterogéneos subperíodos que agrupan cada una de las dos grandes etapas que distinguimos; pero creo que no falsifica lo sucedido, aportando una sugerente línea de interpretación.

Contemplando por unos instantes la primera de esas dos asimétricas partes en que proponemos dividir el siglo recién concluido, apreciamos, efectivamente, cómo las sucesivas hornadas de hombres de ciencia y los cultivadores de los diversos campos de la cultura literaria, artística rivalizan en capacidad y brillo creativos, hasta el punto de poderse hablar, con justificada hipérbole, de una nueva edad de oro de la cultura española. Esto vale no solo para el primer tercio de siglo, es decir, para el conjunto de lo aportado por las generaciones del 98, del 14 y del 27; sino, también, para el más que notable escalón generacional siguiente, el de 1936 y, en parte aún, para el excelente de los años 50. Y vale también lo antedicho tanto para artistas como para investigadores, tanto para el ámbito de la cultura literaria como para el de la cultura científica, por recurrir a los términos de Snow.

Una potencia creativas muy superiores a los que podía exhibir el proceso de industrialización en España, que avanzaba a ritmo lento, sufriendo además un tajo profundo entre la mitad de los años 30 y el comienzo del decenio de 1950. Es cierto que en los dos primeros tercios del siglo la economía española, fuertemente protegida de la competencia exterior, diversifica su tejido industrial, tanto sectorial como territorialmente, al tiempo que se eleva el grado de urbanización y de alfabetización de la población; pero el crecimiento de la renta por habitante presenta como media un valor muy modesto, acentuándose, cuando la centuria está ya más que mediada, la distancia que durante el ochocientos arrastrábamos respecto de los niveles medios de renta de la mayor parte de los países europeos occidentales.

Ese es el marco económico en que se desenvuelven las trayectorias creativas de los integrantes de esos cinco peldaños generacionales señalados. Respecto de los que cabe predicar las tres notas caracterizadoras siguientes:

  • En primer lugar, su anticipación al proceso de modernización económica y social, al que, sin duda, contribuyen con sus obras, estimulándolo, sin poderse sin embargo beneficiar de la cobertura productiva y mercantil que una industrialización más avanzada les hubiera proporcionado.
  • En segundo lugar, y derivadamente, la escasa articulación organizativa y comercial de ese brillante progreso secular, consiguiéndose, pues, esos avances creativos como suma de admirables esfuerzos aislados, sin que el talento creador y la inventiva de cada cual pudiera beneficiarse de estructuras colectivas favorecedoras de la creatividad y de la difusión de sus logros.
  • La tercera característica es la de ir a contrapié en muchos casos de las condiciones políticas, de los valores materiales y morales dominantes en la sociedad, lo que espoleaba todo tipo de manifestaciones artísticas y literarias llenas de sentido crítico.

Ese modelo de relación entre producción de cultura, por un lado, y desarrollo económico y social, por otro, vigente durante más de medio siglo, en el que la inventiva y la creatividad individuales suplían, al menos en parte, carencias organizativas y compensaban la parvedad de impulsos institucionales para el fomento y la promoción de los productos artísticos e intelectuales; ese modelo propio de una industria poco evolucionada y de una economía muy cerrada sobre su mercado interior ha dejado de existir en apenas un tercio de siglo, desde iniciado el decenio de 1960 hasta el presente.

Cabe recordar a este respecto algo a lo que no siempre se presta la atención que merece: en apenas cuarenta años, a partir del comienzo de la década de 1960, el crecimiento económico español, en renta por habitante, ha sido con toda probabilidad equivalente al conseguido durante los ciento veinte años anteriores, descontando ese «decenio bisagra» que es el de 1950. Un dato que sin duda impresiona cada vez que se hace a colación. Un crecimiento no poco espectacular que ha ido acompañado de enormes cambios estructurales, como son el proceso de desagrarización, la apertura exterior y la ampliación de la capacidad económica del sector público.

Crecimiento y transformación que han hecho quebrar el anterior sistema de relaciones y funciones del mundo de la creación con su entorno. Una quiebra que debe dejar paso a otro modelo en el que la creatividad cultural y artística ha de contar con los necesarios resortes empresariales para moverse en un escenario sustancialmente modificado, esto es, el propio de un país de industrialización avanzada y con un alto grado de sincronización en una economía internacional cada vez más globalizada. Quiere decirse que el proceso de creación cultural ahora se enmarca en condiciones materiales radicalmente distintas: la chispa inventiva, el talento, incluso el genio del creador tendrán recortadas las posibilidades de dar a conocer, de proyectar, de trascender sus obras si no es a través de organizaciones sólidas de producción y de mercado. Sólo asumiendo esta realidad se podrá explotar adecuadamente — esto es, en términos de mercado y más allá de las fronteras— la multiplicada capacidad creativa que en la España democrática manifiestan generaciones nacidas ya a partir de los 50 y cuyos elementos históricos de referencia son la transición política y la convergencia con Europa.

Un contingente creativo al que debe sumarse, obligadamente, el que surge del resto de las sociedades hispanohabalantes, porque sobre todas ellas descansa el dinamismo de la comunidad lingüística, la potencialidad y el atractivo del idioma. Y, aunque con temporalidad distinta, también es común a la experiencia iberoamericana un cierto desajuste entre capacidad creativa y desarrollo industrial, que sólo parece haber logrado un acoplamiento vivificador en el entorno de las fecundas décadas que median entre los 50 y los 70, cuando creadores y editoriales de Hispanoamérica polarizaron la producción cultural en lengua española. Pasada esa época, y tras la severa crisis de los 80, todavía no parece recuperada la industria cultural iberoamericana, que se revela incapaz de situarse al nivel que reclama la vitalidad creativa de la región.

Todo lo cual apunta a una misma conclusión a uno y otro lado del océano: la necesidad de estimular una industria cultural que potencie los esfuerzos individuales, dándoles a éstos su valor de mercado. Y no será tanto el apoyo material del Estado lo que se requiera, en muchas ocasiones, cuanto la correcta definición de los derechos de propiedad, el marco de estímulos correcto para que los particulares se sientan, según el caso, atraídos a emprender, unos, y a sostener, otros, las empresas culturales. Empresas culturales en toda su dimensión, integrando los nuevos espacios que propician los nuevos entornos de comunicación. No cabe olvidar que, de acuerdo con los datos del 1999, cerca de 4 millones personas en España y más de 11 millones en América Latina, todos ellos de habla española, estaban conectados a Internet.

Apostar por la industria de la cultura, en suma, será una buena apuesta para la política económica española: los hechos lo hacen exigible. Entre otras cosas, para seguir aspirando a que España, también en este terreno, ahora ya a la puerta del nuevo milenio, sea capaz de flotar sobre la corriente de los tiempos, por emplear una expresión muy querida de Ortega, quizá el intelectual español de nuestro siglo que, gracias al apoyo industrial de Urgoiti, mejor cobertura empresarial ha encontrado para su trabajo creativo, lo cual tal vez no sea ajeno a la proyección que felizmente ha encontrado su obra. Tomemos todos buena nota.

NOTA DEL BLOGGER: Mañana, en el segundo capítulo, transcribiremos la ponencia "La fuerza de un idioma global".

lunes, 25 de agosto de 2008

A. Perez-Reverte: 'Mi propio manifiesto'



A ciertos amigos les ha extrañado que el arriba firmante, que presume de cazar solo, se adhiriese al Manifiesto de la Lengua Común. Y no me sorprende. Nunca antes firmé manifiesto alguno. Cuando leí éste por primera vez, ya publicado, ni siquiera me satisfizo cómo estaba escrito. Pero era el que había, y yo estaba de acuerdo en lo sustancial. Así que mandé mi firma. Otros lo hicieron, y ha sido instructivo comprobar cómo en la movida posterior algún ilustre se ha retractado de modo más bien rastrero. Ése no es mi caso: sostengo lo que firmé. No porque estime que el manifiesto consiga nada, claro. Lo hice porque lo creí mi obligación. Por fastidiar, más que nada. Y en eso sigo.

No es verdad que en España corra peligro la lengua castellana, conocida como español en todo el mundo. Al contrario. En el País Vasco, Galicia y Cataluña, la gente se relaciona con normalidad en dos idiomas. Basta con observar lo que los libreros de allí, nacionalistas o no, tienen en los escaparates. O viajar por los Estados Unidos con las orejas limpias. El español, lengua potente, se come el mundo sin pelar. Quien no lo domine, allá él. No sólo pierde una herramienta admirable, sino también cuanto ese idioma dejó en la memoria escrita de la Humanidad. Reducirlo todo a mero símbolo de imposición nacional sobre lenguas minoritarias es hacer excesivo honor al nacionalismo extremo español, tan analfabeto como el autonómico. Esta lengua es universal, enorme, generosa, compartida por razas diversas mucho más allá de las catetas reducciones chauvinistas.

La cuestión es otra. Firmé porque estoy harto de cagaditas de rata en el arroz. Detesto cualquier nacionalismo radical: lo mismo el de arriba España que el de viva mi pueblo y su patrona. Durante toda mi vida he viajado y leído libros. También vi llenarse muchas fosas comunes a causa del fanatismo, la incultura y la ruindad. En mis novelas históricas intento siempre, con humor o amargura, devolver las cosas a su sitio y centrarme donde debo: en el torpe, cruel y desconcertado ser humano. Pero hay un nacionalismo en el que milito sin complejos: el de la lengua que comparto, no sólo con los españoles, sino con 450 millones de personas capaces, si se lo proponen, de leer el Quijote en su escritura original. Amo esa lengua-nación con pasión extrema. Cuando me hicieron académico de la RAE acepté batirme por ella cuando fuera necesario. Y eso hago ahora. Que se mueran los feos.

Quien afirme que el bilingüismo es normal en las autonomías españolas con lengua propia, miente por la gola. La calle es bilingüe, por supuesto. Ahí no hay problemas de convivencia, porque la gente no es imbécil ni malvada, ni tiene la poca vergüenza de nuestra clase política. La Administración, la Sanidad, la Educación, son otra cosa. En algunos lugares no se puede escolarizar a los niños también en lengua española. Ojo. No digo escolarizar sólo en lengua española, sino en un sistema equilibrado. Bilingüe. Ocurre, además, que todo ciudadano español necesita allí el idioma local para ejercer ciertos derechos sin exponerse a una multa, una desatención o un insulto. Métanse en una página de Internet de la Generalidad sin saber catalán, por ejemplo. De cumplirse el propósito nacionalista, quien dentro de un par de generaciones pretenda moverse en instancias oficiales por todo el territorio español, deberá apañárselas en cuatro idiomas como mínimo. Eso es un disparate. Según la Constitución, que está por encima de estatutos y de pasteleos, cualquier español tiene derecho a usar la lengua que desee, pero sólo está obligado a conocer una: el castellano. Lengua común por una razón práctica: en España la hablamos todos. Las otras, no. Son respetabilísimas, pero no comunes. Serán sólo locales, autonómicas o como queramos llamarlas, mientras los países o naciones que las hablan no consigan su independencia. Cuando eso ocurra, cualquier español tendrá la obligación, la necesidad y el gusto, supongo, de conocerlas si viaja o se instala allí. En el extranjero. Pero todavía no es el caso.

Y aquí me tienen. Desestabilizando la cohesión social. Fanático de la lengua del Imperio, ya saben. Tufillo franquista: esa palabra clave, vademécum de los golfos y los imbéciles. La puta España del amigo Rubianes. Etcétera. Así que hoy, con su permiso, yo también me cisco en las patrias grandes y en las chicas, en las lenguas –incluida la mía– y en las banderas, sean las que sean, cuando se usan como camuflaje de la poca vergüenza. Porque no es la lengua, naturalmente. Ése es el pretexto. De lo que se trata es de adoctrinar a las nuevas generaciones en la mezquindad de la parcelita. Léanse los libros de texto, maldita sea. Algunos incluso están en español. Lo que más revienta son dos cosas: que nos tomen por tontos, y la peña de golfos que, por simple toma y daca, les sigue la corriente. Pero de ellos hablaremos la semana que viene.

Arturo Perez Reverte, en XL Semanal.

viernes, 22 de agosto de 2008

Las teorías de un filólogo norteamericano: G. Kaplan

El profesor Kaplan estudiaba las iglesias rupestres en Valderredible cuando se encontró con San Millán de la Cogolla y su presencia en el valle, para llegar a una teoría que sitúa el origen del español en esta zona de Cantabria.

Puntos clave

Foco de peregrinaje: Establece la existencia de un foco de peregrinaje en Valderredible que empezó a prosperar en el siglo VI, varios siglos antes de que el auge del monacato ficiera que naciesen otros focos en el norte de la Península, y antes del establecimiento del Camino de Santiago.

La apropiación de un culto: El profesor Kaplan sostiene que Gonzalo de Berceo, en el siglo XIII, manipuló de forma interesada los datos históricos de la vida de San Millán, escrita por San Braulio de Zaragoza en el siglo VII. Éste establecía que Millán pasó 40 años en una cueva situada al sur de Cantabria y daba datos que posibilitaban su ubicación en Valderredible. Sin embargo, Gonzalo de Berceo, para aprovechar el culto a San Millán y por el interés económico de su monasterio, cambió la historia brauliana y situó el oratorio de Millán en una cueva dentro de la iglesia de Suso.

A la búsqueda de la prueba escrita: Kaplan se hace eco de la teoría del profesor británico Ralph Penny en su 'Gramática Histórica del Español' (Barcelona. Ariel, 2001) que sostiene que el español nació en las iglesias rupestres de Valderredible. Según Kaplan, la lengua hablada en Valderredible durante la época de San Millán marca la primera pauta en una evolución que, tras perder Valderredible su prestigio con el traslado de las reliquias del santo, continuó en los lugares que conseguían tal importancia, desde el monasterio de la Cogolla a ciudades más al sur. Kaplan busca algún ejemplo escrito que descubra rasgos del castellano primitivo.

NOTA DEL BLOGGER: Con independencia de dónde se originase concretamente el español, es evidente que lo hizo en la zona norte de España. Pero lo realmente importante es que se ha convertido con el paso de los años en una de las lenguas más importantes del mundo, 2ª lengua franca a nivel mundial, y la segunda lenguas cuyo estudio es más demandado como lengua extranjera. Y paradójicamente, en ciertos rincones del país en que se originó, los derechos de sus hablantes están discriminados respecto a quienes hablan lenguas étnicas, de escasa implantación y menor difusión. La riqueza cultural y económica que se deriva del español es enorme, y suscita envidias entre quienes tienen otra lengua peninsular como lengua materna. Pero la fuerza del español es imparable, y sus hablantes continuaremos reivindicando nuestro derecho a utilizarla en todos los ámbitos (públicos y privados).

jueves, 21 de agosto de 2008

La tierruca ¿cuna del español?

UN ESTUDIO SITÚA EL ORIGEN DEL IDIOMA EN CANTABRIA
En Valderredible, donde San Millán de la Cogolla trabajó casi toda su vida

El presidente cántabro junto a la directora del Instituto Cervantes. (Foto: EFE)

ELMUNDO.ES - SANTANDER.- La Universidad de Tennessee (Estados Unidos) está elaborando un estudio que asegura que el español nació en el municipio cántabro de Valderredible, donde vivió "casi toda su vida San Millán de la Cogolla", según ha anunciado el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla.

El trabajo, que se publicará en marzo del próximo año, está dirigido por el profesor Gregory Kaplan, de la universidad americana, y se está preparando desde hace diez años, aunque Revilla ha explicado que él ha conocido su existencia hace unos días, cuando se entrevistó en Cantabria con el responsable del estudio.

Según Revilla, en el trabajo se indica que San Millán de la Cogolla trabajó "casi toda su vida" en Valderredible (el municipio del sur de Cantabria que limita con Burgos y Palencia), aunque sus restos fueron posteriormente trasladados al monasterio que lleva su nombre en La Rioja.

El presidente cántabro ha asegurado que el estudio señala también que fue Gonzalo de Berceo quien "interesadamente cambió la historia en beneficio de lo que suponían en aquellos momentos las reliquias de los santos". El estudio viene "no desde Cantabria, sino desde el prestigio de esa universidad y todo su equipo, el idioma español nace en Valderredible, Cantabria", según ha apostillado el presidente de la comunidad, quien ha aclarado que su Gobierno no pretende con esto "entrar en discusión con ningún otro territorio".

Un apoyo para el Centro de Estudios de Comillas
Revilla ha insistido en que esta "importante" noticia no ha sido "buscada ni por el presidente ni por el Gobierno de Cantabria", aunque ha destacado este estudio para el proyecto que la comunidad está promocionando en Comillas, para crear en su antigua Universidad Pontificia el Centro Internacional de Estudios del Español (CIESE). El presidente cántabro ha hecho este anuncio durante su intervención en un curso de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, titulado '¿Quién paga la cultura? Del canon digital a la industria del español', en el que ha participado junto a la directora del Instituto Cervantes, Carmen Caffarel.

Caffarel ha destacado la creación del CIESE en Comillas, un proyecto en el que participa el Instituto Cervantes y que ha considerado que "no choca" con ninguna otra iniciativa de promoción del español que lleve a cabo otra comunidad autónoma.

La directora del Instituto Cervantes ha opinado que existe un "número suficiente" de personas que vienen a España a estudiar español para que las comunidades autónomas "que lo consideren desarrollen proyectos de este tipo". Según Caffarel, España "es capaz de ofrecer alternativas diferentes en diferentes comunidades autónomas con distintas especificidades".

"Apoyamos (en el Instituto Cervantes) Comillas, como apoyamos otros proyectos en otras comunidades", ha afirmado Caffarel, que ha calificado de "bonito" el proyecto para la antigua Universidad Pontificia, aunque ha reconocido que es "incipiente" al estar aún en rehabilitación la que será su sede, en el Seminario Mayor de la universidad.

miércoles, 20 de agosto de 2008

UIMP: La industria del español en el mundo


Hoy, 20 de agosto, este humilde bloggero, de vacaciones en su tierra natal, Santander, ha tenido el placer de asistir a una de las jornadas del curso dirigido por mi paisano el periodista Jesús Ruiz Mantilla.

El tema de hoy era 'La industria del español en el mundo'. A continuación, transcribo la noticia recogida por
EL DIARIO MONTAÑES, que posteriormente ampliaré con mis propias notas:


revilla lo aseguró hoy en la uimp
"Un estudio demuestra que el castellano nació en las cuevas rupestres de Valderredible"
Revilla destaca el auge del español en el mundo y aboga por sacar más rendimiento a la industria del lenguaje

Un estudio de la Universidad de Tennessee, que verá la luz en febrero o marzo del próximo año, sitúa el origen del español en las cuevas rupestres de Valderredible, en Cantabria , en las que vivió "prácticamente toda su vida" San Millán de la Cogolla.

Así lo aseguró hoy el presidente cántabro, Miguel Angel Revilla, quien subrayó además que no se trata de una investigación con origen en Cantabria, sino en un equipo de expertos estadounidenses dirigidos por el profesor e investigador de la Universidad de Tennessee Gregory Kaplan.

De hecho, explicó que él no sabía de la existencia de ese estudio, en el que se trabaja desde hace diez años, y ha sido el propio Kaplan, al que ha conocido "hace diez días", el que le ha explicado sus investigaciones.

Según destacó Revilla con motivo de su intervención en un curso de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), los trabajos realizados por este estudioso y "un equipo de lingüistas impresionante" concluyen "sin ningún tipo de duda" que el origen del español está en las cuevas rupestres de Valderredible.

Además, evidencian que fue Gonzalo de Berceo "el que, interesadamente, cambió la historia", con el traslado de los restos de San Millán, "en beneficio de lo que suponían en aquellos momentos las reliquias de los santos".

"No desde Cantabria, sino desde el prestigio de esa universidad, el idioma español nace en Valderredible", sentenció el presidente cántabro, quien insistió en que se trata de una noticia "muy importante" que "no ha sido en absoluto buscada" ni por él como presidente ni por Cantabria y que no pretende ser motivo de "discusión con ningún otro territorio".

A su juicio, la noticia supone además "un motivo más" para que el centro de referencia de la lengua española proyectado en Comillas esté en Cantabria .

Kaplan había esbozado esa misma teoría en un estudio anterior publicado por el Gobierno de Cantabria

El director del Departamento de Lenguas Modernas de la Universidad de Tennessee (EEUU), Gregory Kaplan, basa su teoría sobre el nacimiento del castellano en Valderredible en la importancia cultural que cobró ese municipio del sur de Cantabria en los siglos VII y VIII gracias al culto a San Millán.

El presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, se refirió hoy a este profesor estadounidense durante su intervención en un seminario de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) para adelantar que, en marzo de 2009, publicará un estudio en el que defiende que el castellano nació en el sur de Cantabria , en el municipio de Valderredible, limítrofe con Palencia y Burgos.
La página web de la Universidad de Tennesse (www.utk.edu), radicada en Knoxville, confirma que el profesor Kaplan trabaja en la actualidad en un monográfico sobre 'Los orígenes de la lengua española en Valderredible, en el sur de la región de Cantabria'.
Este investigador estadounidense ya había esbozado esa misma teoría en su anterior trabajo, 'El culto a San Millán en Valderredible: Las iglesias rupestres y la formación del Camino de Santiago', publicado por el Gobierno de Cantabria en 2007.

En ese trabajo, Kaplan sostiene que las ermitas rupestres de Valderredible fueron excavadas durante el siglo VII por los seguidores del culto a San Millán (474-574), un eremita que había vivido en una de ellas y había realizado milagros para los peregrinos durante los últimos 30 años de su vida.
Mantiene además que la construcción de estas iglesias rupestres en el período visigodo fue uno de los acontecimientos que condujeron a la formación del camino de peregrinación a Santiago.
"Los lingüistas han sospechado desde hace tiempo que el español nació en el sur de Cantabria a partir del año 700. Mi libro es el primero en aportar evidencias sólidas de que la región era realmente un centro cultural durante el siglo octavo", explica el propio Gregory Kaplan en la web de la Universidad de Tennessee, refiriéndose a su estudio sobre el culto a San Millán en Valderredible.

Según su teoría, serían los seguidores de ese culto al santo los que llevaron el castellano al monasterio de San Millán de la Cogolla, en La Rioja, donde se conservan los primeros testimonios escritos del castellano, las famosas 'Glosas Emilianenses'.

"Motor de futuro"
Durante su intervención en el curso '¿Quién paga la cultura? Del canon digital a la industria del español', Revilla afirmó que el español es "el mayor patrimonio" del país y su "gran motor" en el futuro y, por ello, instó a sacar "mucho más rendimiento" al idioma en todos los aspectos. "La lengua es una industria, pero también son lazos, afinidades, políticas, geoestrategia", dijo.

A su juicio, "por encima de cualquier artificialidad orográfica y geográfica" que ubique a un Estado en un determinado grupo de países, "la lengua es el aglutinante fundamental" y existe una "mayor afinidad" con aquellas personas con las que se comparte idioma.

Asimismo, destacó que el español es una lengua "imparable", la "más emergente" del mundo, principalmente en Estados Unidos, donde ya hay 45 millones de hispanohablantes, más que en España.

Además, reivindicó el papel de la Fundación Comillas como "referente de la lengua más importante de este siglo" y, tras recordar el proceso de gestación de la idea, reconoció su "obsesión" por este "proyecto del siglo para Cantabria ", que permitirá que el nombre de Comillas suene junto a otros como "Harvard, Oxford o Cambridge".

"Vehículo comercial" Por su parte, la directora del Instituto Cervantes, Carmen Caffarel, que también ha intervenido en el seminario, se refirió al Proyecto Comillas como una iniciativa "apasionante" y aplaudió el "entusiasmo" del presidente en su promoción.

Caffarel, que ya ha confirmado la celebración el próximo año en Comillas de la reunión de todos los directores del Instituto Cervantes, desgranó algunas de las variables por las que el español es actualmente el segundo idioma del mundo (440 millones de hablantes), por detrás del inglés, y el que más expectativas de desarrollo tiene.

Tal y como señaló, aglutina a 21 estados de ambos lados del Atlántico, cuyos ciudadanos comparten un 90 por ciento de comunicabilidad. En relación con Estados Unidos, Caffarel explicó que en el año 2050 habrá 100 millones de norteamericanos que hablarán español, tendencia que se empieza a palpar ya en factores como la cada vez mayor presencia de medios de comunicación de habla hispana.

La directora del Instituto Cervantes, que apuesta por un "mayor peso" de España en la Unión Europea al ser "puente de expansión" hacia América Latina, aseguró que en términos económicos se estima que el español representa el 15% del PIB nacional y subrayó que este idioma es, además de "sinónimo de prestigio cultural y económico", un "vehículo comercial" que se está afianzando en los ámbitos comerciales, gracias, entre otras cosas, a Internet, donde es la tercera lengua más utilizada.

"Hay suficientes interesados en el español para todos los proyectos"
El Instituto Cervantes tendrá en 2010 sedes en Senegal, Seúl, San Francisco, Nueva Delhi y Tokio

La directora del Instituto Cervantes, Carmen Caffarel, aseguró hoy que hay "número suficiente" de personas interesadas en aprender español para las distintas iniciativas de enseñanza puestas en marcha en la actualidad, como el de Burgos, los cursos de Español para Extranjeros de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) o el Centro Internacional de Estudios Superiores del Español que proyecta Cantabria.

Sobre este proyecto, que tendrá su sede en el edificio de la Universidad Pontificia de Comillas y para el cual se ha constituido la Fundación Comillas, Caffarel opinó que es "bonito", si bien matizó que "todavía" tiene aspectos "por definir" y se encuentra en una fase "incipiente", al igual que las obras de rehabilitación del inmueble.

Detalló que según los datos que proporciona la Feria Internacional de Turismo (FITUR), el denominado 'turismo lingüístico', de personas que acuden a España a estudiar el idioma, es "muy alto", por lo que consideró que "cada comunidad autónoma aporta una especificidad" al respecto.
Además, reiteró que el Instituto Cervantes es miembro del Patronato de la Fundación Comillas, y que también participa en los proyectos de otras comunidades, aunque su labor se centra en la enseñanza del idioma fuera de España, salvo el caso de los cursos de español para extranjeros que se desarrollan en el Campus de Las Llamas de la UIMP.

La directora del Instituto Cervantes realizó estas reflexiones en rueda de prensa previa a su participación en el seminario '¿Quién paga la cultura? Del canon digital a la industria del español', dirigido por el periodista y escritor Jesús Ruiz Mantilla dentro de los cursos de verano de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander.
Expansión del español
Caffarel recordó que el español supone una aportación del 15 por ciento al Producto Interior Bruto (PIB) nacional, si se tiene en cuenta la producción cultural y los medios de comunicación, y que este idioma es ya la segunda lengua de comunicación internacional, detrás del inglés, y hablada por 450 millones de personas.

Próximamente se abrirán nuevas sedes del Instituto Cervantes en Frankfurt, Tokio, Sidney y Nueva Delhi, mientras que se han iniciado las "relaciones institucionales" para la apertura de centros en Senegal y Seúl.

Asimismo, el próximo año se comenzarán los contactos para establecerse en Kiev y San Francisco, lugar que se considera estratégico dada la influencia del español en Estados Unidos, donde hay ya "más hispanohablantes que en España" y su uso tiene una connotación "de prestigio" por los beneficios que aporta el bilingüismo a la búsqueda de trabajo, entre otros factores.

Estos nuevos centros estarían abiertos, "si los presupuestos lo permiten", para el año 2010. "No hay nada que me gustaría más que satisfacer la demanda de todos los países que quieren tener un Cervantes", admitió la directora del instituto, quien definió esta estrategia como una labor de "diplomacia cultural" basada en la "lengua y la cultura" españolas.

Así, indicó que el Instituto Cervantes cuenta con un "gran prestigio" por sus métodos didácticos y de formación, que además tienen la particularidad de que están adaptados al idioma nativo de quienes quieren aprender español.

NOTA: Mañana, añadiré mis notas personales sobre estas amenas conferencias, y posteriormente el siguiente capítulo, que será la lección magistral impartida por el profesor José Luis García Delgado, con el título de "La fuerza de un idioma global".

martes, 19 de agosto de 2008

C's Madrid Noroeste apoya a Iñaki Ezkerra, del Foro Ermua.

Y este humilde bloggero, también. Pero esto es algo que ya he dicho y demostrado en los últimos tiempos. Me alegro de no ser el único, la agrupación de C's en Madrid Noroeste, la fundación DENAES, y muchas otras personas, entre las cuales me encuentro, ya lo hemos hecho. Traslado a continuación el comunicado de la citada agrupación de C's al respecto.




NOTA DE PRENSA
Comunicado de la Agrupación Madrid-Noroeste de C's - Partido de la Ciudadanía:

La Agrupación de Madrid-Noroeste de Ciudadanos- Partido de la Ciudadanía ante los irregulares hechos ocurridos en el Foro Ermua manifiesta su solidaridad y apoyo a su presidente y fundador, don Iñaki Ezquerra, lamentando profundamente el golpe de mano y los ataques personales –totalmente injustificados- que está sufriendo.

No podemos olvidar la simpatía y la ayuda que continuamente nos ha brindado y la solidaridad que siempre ha mostrado hacia nuestro partido y hacia nosotros, pensamos que por una especial sintonía en la defensa de los derechos y las libertades.

Porque afirmamos que el Foro Ermua, el Foro que él representa, comparte los valores fundamentales que desde Ciudadanos enarbolamos, por lo que comprendemos perfectamente y apoyamos sin ninguna reserva su interés en que no se desvirtúe la idea original, el espíritu inicial, y le pedimos encarecidamente que no desista en ese empeño.

Desde aquí le brindamos nuestro apoyo en justa, necesaria y apenada reciprocidad, esperando que la absurda y lamentabilísima situación creada cese lo antes posible para que El Foro vuelva pronto, con su nuevo Faro, a iluminarnos el difícil y duro camino a seguir en nuestra lucha común contra las agresiones nacionalistas y en la defensa de la dignidad de las personas.

Y este bloggero, Luis Fernández del Campo, desde Cantabria, se adhiere a este comunicado.

lunes, 18 de agosto de 2008

Otro socialista con 'sentido común': Alfonso Guerra

Guerra recuerda a Montilla que se enfrentó a los más nacionalistas del PSC

Respecto a la financiación autonómica, el ex vicepresidente del Gobierno considera que la teoría de las balanzas fiscales es algo "predemocrático, de antes de la Revolución Francesa"


Publicado en: EL PAIS

El ex vicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra ha situado al presidente de la Generalitat, José Montilla, "entre dos fuegos" en el debate sobre la financiación catalana. "Lo tiene complicado allí", ha asegurado el presidente de la Comisión Constitucional del Congreso, que ha recordado a Montilla su pasado enfrentado a los más nacionalistas del PSC: "Procede de un grupo que llamaban de los capitanes, enfrentado a las posiciones de un sector del PSC que era más nacionalista".

Desde la sede Antonio Machado de la Universidad de Andalucía, donde ha inaugurado los cursos de verano, Guerra ha afirmado, en relación a Montilla, que "los políticos tienen que demostrar que son buenos gobernantes y estadistas cuando tienen dificultades", recalcando que "cuando las cosas van bien, todo el mundo lo hace con comodidad".

Respecto a la negociación de la financiación autonómica, ha insistido en que la teoría de las balanzas fiscales es algo "predemocrático, de antes de la Revolución Francesa", y que ahora lo defienden grupos "que tienen etiqueta conservadora y progresista y como sigan así se van a quedar sólo con la etiqueta". "Ésas no son posiciones progresistas", ha destacado el presidente de la Comisión Constitucional y de la Fundación Pablo Iglesias, quien ha resaltado que ve con "cierta decepción" que la "gran operación" de descentralización que se hizo en España "a veces tenga como fruto que cada uno quiera tirar de un trozo de la manta para llevarse más que otros". Guerra ha augurado que si las comunidades "van a llevarse lo más que puedan de la riqueza nacional, mal camino van a tomar".

"No es escandaloso que se prorroguen los Presupuestos"
Alfonso Guerra ha afirmado hoy que no sería "escandaloso" ni "se hunde la democracia" se si prorrogan los Presupuestos Generales del Estado por la falta de acuerdo entre los grupos ya que, según ha recordado, varias veces en la historia de la democracia se ha llevado a cabo este procedimiento.

sábado, 16 de agosto de 2008

Artículo de I. Ezkerra: 'El gran invisible del verano' y reflexiones al respecto.

Desde las páginas de este blog ya he declarado en múltiples ocasiones mi respaldo a Iñaki Ezkerra, tengo el enorme placer de conocerlo personalmente, y creo firmemente que él realmente representa el auténtico espíritu originario del Foro Ermua. Pero en todas las organizaciones acaban llegando arribistas, y en ocasiones logran hacerse con el poder, con el único propósito de satisfacer sus egos, y obtener beneficios personales. Esto es lo que sucede actualmente en el Foro Ermua, tal y como ya habréis podido ir leyendo en los posts publicados al respecto en este blog.
Hoy voy a traer a colación el último artículo de I. Ezkerra en LA RAZÓN, que ironiza sobre el comportamiento de determinados políticos, y cómo nos tratan, desde su torre de marfil, a los que no somos políticos profesionales. ¿Por qué no se puede ser honrado, leal y fiel a los amigos, en la política? ¿por qué no se puede entender la política como un servicio a la comunidad, y no como un beneficio propio? ¿por qué tan poca gente tiene interés en dignificar la política?
Gente como I. Ezkerra, como los fundadores de Foro Ermua, y como los que conformamos Ciudadanos - Partido de la Ciudadanía, deseamos una sociedad mejor, y creemos que la política debería estar al servicio de los ciudadanos. Aunque no nos quieran creer, aunque nos ignoren, aunque nos insulten, aunque mientan sobre lo que decimos, seguiremos aquí, tratando de aportar un rayo de luz en esta siniestra penumbra de la política española.

El gran invisible del verano

Si te he visto no me acuerdo. Los que no somos políticos profesionales no tenemos corazoncito.
Iñaki EZKERRA
Agosto ha sido siempre un mes propicio a las noticias excéntricas de carácter científico. Quizá porque es un mes en el que no pasa nunca nada, la prensa da canchita a la peña inventora y nos informa de los más estrafalarios avances o descubrimientos. De repente leemos en grandes titulares eso de «No hay vida en Marte» como si tal desmentido supusiera la gran decepción de nuestra vida; como si deseáramos ardientemente que la hubiera y nuestra existencia fuera a cambiar al cerrarse tal posibilidad. En este agosto la noticia científica -aparte de la de que no hay vida en Marte, que sale todos los veranos- ha sido la de Xiang Zhang, el físico de la Universidad de Berkeley que ha dado con una fórmula para lograr la invisibilidad. Las malas lenguas dicen que se ha inspirado en la estructura molecular de Patxi López, el secretario general de los socialistas vascos. De Patxi López se han hecho siempre chistes de que era invisible, pero no se había llegado nunca a dar este importante paso de sacar a esa evidencia una rentabilidad biomagnética. Al parecer el «truco» consiste en haber logrado imitar mediante sofisticadas técnicas de reducción nanotecnológica las capas de composición microscópica en forma de red que posee de un modo natural el ilustre político vasco y que hacen que la luz infrarroja muestre un índice de refracción negativo cuando ilumina ese extraño material patxilopeziano que es diez veces más fino que el papel.
Xiang Zhang afirma que queda mucho camino para lograr la invisibilidad total, pero eso lo dice por modestia. Todo el mundo sabe que el experimento ha sido un éxito y que el conejillo de Indias ha sido Jaime Mayor Oreja. Mayor Oreja es el gran invisible de este verano. Se han sucedido en su ámbito de influencia los seísmos, las dimisiones en el PP vasco, las turbulencias en el Movimiento Cívico, pero a él no se le ve el pelo, o sea que el «brebaje» de la Universidad de Berkeley ha funcionado. A mí es que me extraña lo de este hombre. ¡Con la cantidad de artículos que le he dedicado y ahora este silencio! ¡Con lo humano y lo cristiano que es! Nada, ni una llamada para preguntarme cómo estaba en el plano personal y sin entrar en lo ideológico. ¡Cómo son los políticos, determinados políticos! A ellos hay que llamarles cuando están en horas bajas, cuando pierden elecciones, cuando les linchan mediáticamente aunque cobren bien por ello, pero tú, que arriesgas tu vida gratis, te ves en una situación fea en la que te han montado un pifostio sin comerlo ni beberlo unos coleguis del Foro Ermua y que te den morcilla. Si te he visto no me acuerdo. Los que no somos políticos profesionales no tenemos corazoncito.
Uno se acuerda de cuando le apoyó en la prensa para sucesor de Aznar, de cuando le llamó para consolarle porque Aznar no le había hecho sucesor, de cuando le defendió aquella vez que llegó tarde al Parlamento vasco, de cuando le echó flores porque todos se las echaban a Rosa Díez, de cuando dijo la estupidez de que se vivía muy bien con Franco y uno le sacó la cara? Jaime Mayor va este verano de invisible porque tiene enchufe con Xiang Zhang, pero con la invisibilidad pasa como con todo. Ahora es una cosa muy cara y para unos pocos, pero dentro de un par de años se podrá conseguir por internet. Pasará como con los móviles.

viernes, 15 de agosto de 2008

Iñaki Ezkerra declara a El Plural que los "integristas católicos" han tomado el Foro de Ermua


“Castilla llegó con el aval de Mayor Oreja y desde entonces hubo un poder en la sombra”

EL PLURAL.COM - S. COLADO

Iñaki Ezquerra, recientemente defenestrado de la dirección del Foro de Ermua, asegura en una entrevista a El Plural que no pretende ejercer “una presidencia fantasmagórica” y que hasta que los tribunales diriman sobre su polémica sustitución hablará “con voz propia”. Insiste en que en la raíz del conflicto en el seno de la asociación cívica está el diferente uso que de ella hacen los “integristas católicos” que ahora ocupan la dirección y el núcleo fundador, compuesto en gran parte por elementos procedentes de la izquierda.


- ¿Cuál es el problema de fondo de la división en el Foro?
La Fundación Papeles de Ermua ha usurpado la identidad del Foro. Los fundadores del Foro procedíamos de la izquierda, en mi caso del Partido Comunista, y en ese sentido sí existió una cierta incapacidad organizativa fruto de nuestra tendencia asamblearia. Cuando llega en 2000 Inmaculada Castilla de Cortázar –pilar de la dirección actual- aparta al inductor del proyecto y la Fundación Papeles hace para el Foro una revista monjil e infantil. Lo que sí que hay que reconocerle es capacidad de embaucar. Castilla llegó con el único aval de Mayor Oreja. Desde entonces hubo un poder en la sombra en la asociación.

- ¿Son visiones muy diferentes de la asociación?
Que seas agnóstico por ejemplo les molesta, están caracterizados por un integrismo católico y un talibanismo ridículos en pleno siglo XXI. Su reaccionarismo llega a cuestionar a un poeta como presidente. Desde que llegué he luchado contra ese sector reaccionario, ayudado por gente como Antonio Aguirre, aunque a veces ha sido inevitable que la asociación se escorara hacia ese extremo. Nuestro objetivo no es derribar gobiernos, sino un frente constitucional integrado por todos los partidos democráticos.

- El sector de Mayor Oreja pierde fuerza en el PP vasco, ¿pero lo gana en el Foro?
Desde que apoyé a Basagoiti tuve serios problemas en el Foro. Anteriormente ya los había tenido cuando critiqué el posicionamiento de los obispos antes de las elecciones, aquello fue una astracanada.

- ¿Habrá dos asociaciones paralelas que se reivindican legítimas?
Hasta que los tribunales diriman hablaré con mi propia voz, no voy a ejercer una presidencia fantasmagórica. Ahora carezco no de representatividad, pero sí de la base organizativa. Además lo mío no es la movilización, obviamente necesaria, sino el contenido ideológico.